sábado, 13 de octubre de 2012

poema a Daniel


Poemas al destino de Daniel

Avant le coucher
¿Cuántos años han pasado?
Unos tres largos años donde no volví a ver tus hermosos ojos
Con nostalgia miro desde la ventana de mi habitación
El sol tiñe de dorado las flores
Mientras un sereno viento se complace al acariciar sus pétalos.

¿Te acordaras de mí como me acuerdo de ti?
Como olvidar su negra cabellera
Sus oscuros ojos verdes vestidos con lágrimas
Con anhelo me llevo los dedos a mis labios
Mi corazón palpita loco por esa imagen…
Tus finos labios…

¿Por qué el destino nos cruzo en ese parque?
Fuiste el único que no me contemplo con malicia
Lograste mirar la luz que de mi emana
…pero en tus ojos vi un miedo, mucho miedo
Fue cuando comprendí que tu padre es la razón de tus temores.

Sentí la necesidad de protegerte
De llevarte a un lugar solo, oscuro y aislado
Donde yo pudiera ser lo único que tus ojos vean
Donde sea mi vos, la única melodía que desearas danzar
Donde sea mi aroma el único olor que puedas percibir.

¿Cómo es de cruel el destino en el juego del amor?
Yo un joven de dieciocho años
De cuerpo envidiable para los dioses del Olimpo
Ojos pardos, cabello negro como el ébano
De piel blanca como el mármol
Cincelado hasta el más mínimo detalle
Una tableta dura y fina acompañada de pectorales fuertes
Piernas de atleta con un pene que mide como mi edad
Y… me vengo a enamorar de ti.

Cuando te conocí eras un joven triste y derrotado
Que había decidido aislarse del mundo a la orilla de un lago
Creyendo que moriría por ser gay
¿Cómo puede llegar la gente a ser ignorante y temerosa?
En tu mirada se reflejaba una luz…
Decidí llamarla amor.

¿Pero como puedo ser un guerrero de un escudo que teme luchar?
Recuerdo que me senté a tu lado
Tú bello rostro bañado en lagrimas
Me desarmaba en pedazos, me dolía verte así
Te di ánimo tras ánimo en busca de una sonrisa
Solo eso me bastaba.

La luz de tus ojos brillo cada vez con más intensidad
Tu sonrisa segaba mi espíritu
Y tu boca… tú bella boca
El templo que custodiaba el néctar y ambrosia
Que tanto deseaba probar mi cuerpo.

Te vi recostarte en el suelo
Sin ningún rastro ya de miedo
Mi cabeza me repetía una y otra vez –es él, no hay duda es él
Pero amigo he sufrido tanto que al corazón no le creo
Y  fue en ese instante donde mis oídos perseguidores de esperanza
-me siento a gusto a tu lado- me dijiste.

¿Por que vuelvo a sentirlo latir?
Por que mi corazón late con fuerza cuando pienso en ti
La velocidad del bombeo de sangre calienta mi piel
Tenia que hacerlo…
Debía hacerlo…
Y así ese día le robe un beso a tus suaves labios rojos.

Los sentí chocar con los míos
Tú boca apretaba mis labios, les sentí tan fríos
Tú boca era tan inexperta… creo fui tú primer beso
…suspiro…
Continúo con los ojos clavados en el horizonte
Mientras mis dedos no se apartan de mis labios
… tu primer beso.

He vuelto ha la realidad
Pero aun que tú no estas en ella, tu recuerdo es mi presente
He decidido recostarme un rato
Mi cabeza me repite –él no es otra cosa sino el amor de tu vida
Creo que mi destino es volverse a encontrar con el tuyo
Por eso lo último que te dije en aquella tarde dominical fue
-me llamo Daniel y si el destino lo permite nos volveremos a ver…

El cofre de mi corazón ha vuelto abrirse
La esperanza será la llave que jamás podre tirar
Los sentimientos de pasión, desenfreno y locura me recorren
¿Por qué tú recuerdo me calienta de esta manera?

La imagen de tu cuerpo se posa en mi cabeza
Tú piel morena…
Tus ojos verdes, tu boca
¡Joder! Tú cuerpo bien formado
De culo duro, parado y redondo
Un pene digno de tan viril cuerpo.

La ropa me sofoca
Mis ojos se han cerrado
Le abren paso a la imaginación
El calor me hace despojarme de la camisa.

Mis dedos aprietan con fuerza mis erectos pezones
El sudor me ha comenzado a lubricar
Las yemas de mi mano libre, aprietan mi tableta
Bajan libres, sin prisa
Solo siguen el camino.

No puedo evitar gemir
¡Joder! El pantalón me estorba
Despojándome de toda la ropa
En un brinco desesperado, sale en libertad mi erecto trozo de carne
Finalmente golpea con mi tableta.

-¡que delicia!
Mi mano guiada por el calor me lo aprieta fuertemente
Unos movimientos de arriba a bajo
Acompañada de suaves apretones
Invitan al líquido pre seminal a salir.

La mano que hasta hace un momento me oprimía los huevos
Viaja libremente a mi glande
Para untarse de tan transparente néctar
Mis labios lo desean
Mis dedos carceleros de la pasión le conceden su deseo.

Mientras me lubrico los labios
Pienso en el beso que nos dimos
¡Que placer! Me sofoco la fuerza de la masturbación me impide respirar
Mi mano toma fuerza con tu recuerdo.

Ya siento mis bolas a reventar
Cargadas a semen, tú semen
Mi mano no detiene su andar, me lo ahorca con cada apretón
Mi glande palpita ¡que sensación!

Mi zona pélvica se contrae
Mis labios se abren
Dejan entrar al huésped invasor
Suelo imaginar que mis dedos son tu pene
Que agridulce sabor.

-aaah me corro
La caliente lefa
Cae sobre mis pectorales y dejan gotas en mi tableta
Saco mis dedos de la boca
He inundado mis pulmones a aire.

Tengo la mirada perdida en el techo
Salen mis dedos de la boca
Han decidido dormir en mis labios…
Con el recuerdo de aquel beso en esa tarde dominical.

-¡si el destino lo permite nos volveremos a ver!
Han pasado tres largos años desde que te vi
…suspiro…
Te sigo esperando, para que pasemos juntos una eternidad
Desafiando a la muerte
Tú destino es estar con el mío.

No aguanto la agonía que causa el tiempo
Me oprime el corazón
Tortura mi cuerpo
… tu aquel joven del parque te sigo esperando…

Daniel.

No hay comentarios:

Publicar un comentario